Una vertiginosa novela negra situada en la Barcelona más convulsa de mediados del siglo XX.Barcelona, 1946Tras recibir una llamada en la comisaría de Vía Layetana, el inspector Aparicio y el agente Muñoz, dos policías de la brigada criminal, van al Instituto Mental de la Santa Cruz a investigar el asesinato de la hermana Natividad. Ha aparecido muerta en la sala de autopsias con un punzón clavado en el ojo. Allí los atiende el director del centro, Ezequiel Ródenas, aunque les avisa que el máximo responsable del centro, el hermano Olegario, no quiere que se investigue el crimen y les pondrá todos los impedimentos posibles.Mientras están examinando a la muerta, entra en la sala una monja muy nerviosa y les informa de que María, una novicia de diecinueve años, ha aparecido asesinada en su celda, también con un punzón clavado en el ojo. Cuando los dos policías se dirigen hacia allí, alguien provoca un incendio. Al descubrir el cadáver calcinado, Aparicio comprueba que no corresponde al de una muchacha tan joven, sino a una mujer madura.Los policías consiguen aclarar la identidad de la segunda fallecida. Es la he